Hace unos días saltó la noticia que un palmeral en Elche se estaba quemando y la falta de noticias a nivel nacional, propició que la noticia de que “el palmeral de Elche estaba ardiendo” se propagara más rápido que las llamas por toda España.
*Imagen tomada en pleno incendio.
En este enlace podéis ver el vídeo en pleno incendio: https://www.youtube.com/channel/UCHe00mv1IHhHzBI8o7zXR0Q
Gracias a la falta de noticias, muchos medios se han hecho eco del incendio y se ha podido conocer que desde hace unos meses se están quemando más plantaciones de palmeras, lo cual levanta todo tipo de sospechas y especulaciones.
*Imágenes de la parcela donde se originó el primer incendio.
*Imagen de la parcela donde se originó el segundo incendio frente al restaurante la Úrsula.
*Imágenes de la parcela donde se originó el tercer incendio
Pero antes de adentrarnos más en este asunto, vamos al principio de todo, para poder entender así mejor lo que ocurre en la actualidad.
La década de los años 90 y principios del 2000, fue una época muy propicia para la plantación de palmeras, animado por el auge del ladrillo que demandaba palmeras en todo tipo de avenidas, nuevas urbanizaciones, vía publica en general, jardines comunitarios, villas privadas, etc.
Esta gran demanda favorecía la plantación de palmeras de especies “exógenas” y no autóctonas de Elche, por la rapidez de crecimiento, la resistencia a los trasplantes, resistencia a la escasez de agua y sobre todo al bajo coste de la planta, que convertía la plantación de estas palmeras en un negocio redondo tanto para viveristas y promotoras como para particulares que no sabían que plantar en sus tierras para sacar una gran rentabilidad, y encontraron en la plantación de estas palmeras un refugio “seguro” para su inversión agrícola.
Me refiero a la palmera washingtonia robusta, una palmera no originaria de Elche y que en muy pocos años colonizó todo el campo de Elche gracias a la “burbuja de la palmera” que se produjo a su vez por la burbuja del ladrillo, modificando el paisaje rural de Elche en el que antes dominaba en solitario la palmera datilera Phoenix dactylifera, en forma de huertos, viveros de planta joven, agrupaciones y palmeras dispersas.
El punto de inflexión se da cuando en el 2005 llega de forma oficial el picudo rojo a Elche y cuando 3 años más tarde entramos en una dura recesión económica, la tan conocida como “crisis” que aun sigue coleando en algunos sectores de la sociedad.
Desde entonces todo cambia y aunque nunca se ha dejado de vender palmeras, las ventas debido al picudo y a la crisis, bajaron drásticamente y los controles sanitarios por parte de Conselleria, obligaban a los particulares a darse de alta como viveristas para poder obtener el pasaporte sanitario, que para quien no sepa lo que es, viene a ser como un certificado que garantiza que la palmera ha pasado con éxito todos los controles de sanidad vegetal y está libre de plagas y es apta para su comercialización y quien no lo tenga no puede vender palmeras y de hacerlo se arriesga a duras sanciones.
Entonces, aquellos particulares que ven que de la noche al día sus palmeras que antes vendían por 100€, 200€, 300€, 400€ y 500€ según tamaño, pasan a valer en mercado a 10€-30€ y en algunos casos no se las llevan ni regalándolas y para más inri la Conselleria obliga a pagar unas tasas y gastos que conlleva estar dado de alta como viverista, además de que desde ese momento se está sujeto a más controles, llevan a los propietarios de esas parcelas a un camino sin salida con solo dos opciones a la vista.
- Destruir las palmeras asumiendo todos los gastos de destrucción y renunciar al lucro esperado por dicha plantación perdiendo además todo lo invertido hasta entonces.
- Olvidarse de ellas y no intervenir ni gastar ni un euro más en esa plantación para no seguir perdiendo dinero en podas, riegos, tratamientos, abonado, labrado, etc.… con la esperanza de que vuelvan a valer dinero en un futuro y poder liberarse de ellas.
Con esa realidad nos encontramos y es con la que llegamos hasta la actualidad.
*En la imagen podemos observar marcado en rojo, las localizaciones de los 3 últimos incendios sin resolver que se han dado en los últimos 4 meses que están dentro de un radio de 500m.
La palmera washingtonia tiene unas características distintas a las demás palmeras y es que es una de las que más rápido crecen y a medida que crecen seca la palma y no se desprende de la palmera hasta que no es muy alta quedando el tronco o mejor dicho “estipe” cubierto de palmas secas muy inflamables.
El abandono de esas palmeras por parte de los propietarios que decidieron no eliminarlas, es una bomba de relojería ya que es muy fácil prenderles fuego por la gran cantidad de palma seca que puede acumular si no se podan periódicamente.
Yo tengo alguna teoría sobre lo que está ocurriendo actualmente, pero debo aclarar que solo son teorías y no afirmaciones, aunque a veces cuando te dejas llevar por la intuición, experiencia y conocimiento de la situación, tienes muchas posibilidades de acertar en los pronósticos.
Las teorías de lo ocurrido que pasan por mi cabeza son las siguientes:
- Alguien que haya tirado una colilla desde la carretera (esta sin ser imposible, es poco probable por la cantidad de incendios de palmeras que se han sucedido en solo 4 meses).
- Que haya un pirómano suelto y que aún no lo hayan pillado… (esta cobra mucha fuerza).
- Que el propio propietario o gente cercana a él, le hayan prendido fuego con la intención de cobrar algún seguro que tengan contratado, ahorrar en gastos de poda y retirada de palmas u otro motivo que desconozcamos. (Esta teoría es menos probable que la del pirómano, pero no se debe tampoco descartar en nuestro imaginario, pero teniendo muy muy claro que mientras no se demuestre lo contrario, es solo una teoría y especulación y se debe preservar ante todo la presunción de inocencia hasta que no haya pruebas firmes).
A tener en cuenta
En estos días he leído y oído muchas falsedades sobre este asunto como “se ha quemado el palmeral de Elche y el palmeral se debe proteger….
-No se ha quemado ningún palmeral de Elche, han quemado varios viveros de palmeras que no son autóctonas de Elche ni por las que Elche es conocido o tiene el reconocimiento de la UNESCO. Esto es muy importante que los medios de comunicación y los políticos lo aclaren para que no se distorsione esta noticia por el resto de España.
También he oído que se está buscando al culpable y que aún no han dado con él…
-Es cierto que hay un culpable que aún no se ha encontrado (culpable por acción), pero hay otro culpable que es el propietario por inacción y favorecedor por su dejadez en sus responsabilidades y dejar todo muy fácil y accesible para que cualquiera pueda prenderle fuego. El propietario también es culpable y responsable por haber dejado tantos años las palmeras sin podar acumulando palma seca desde el suelo hasta arriba. Si las tuviera podadas y la palma seca empezara a partir de 5-6 de altura, sería mucho más difícil de prenderles fuego y en caso de que ocurriera, la intencionalidad seria mucho mayor.
Hay otro tercer miembro en esta responsabilidad o culpabilidad compartida que es el propio ayuntamiento de Elche.
-Aunque sea la parte con menor responsabilidad, tiene el deber de trabajar de forma proactiva creando ordenanzas municipales que regulen la gestión del palmeral como se elaboró en su día la ley del palmeral.
A mi parecer, se debería crear una ordenanza municipal o incluirlo en la futura ley del palmeral, “un periodo máximo que puede estar una palmera sin podar o sin retirarle las palmas secas”, no cuando se trata de palmeras sueltas y dispersas, sino cuando están agrupadas como es el caso de los viveros de palmeras, para evitar que haya multitud de polvorines repartidos por el campo de Elche esperando a que algún pirómano o desaprensivo les prenda fuego o que de forma inconsciente o accidental, una colilla o algún elemento pirotécnico con la tradición que hay en Elche, provoque más incendios en los que además de lamentar daños materiales, podamos acabar lamentando daños personales e irreparables..
miguelangelsanchezmartinez 