La ciudad de Elche continuamente ha estado adaptándose al medio y ha coexistido durante más de 1000 años con el palmeral.
Como la mayoría de personas ya saben, en el año 2.000, el palmeral de Elche fue declarado patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Hay muchos cambios y adaptaciones que Elche tuvo que realizar para conseguir dicha distinción, pero hay muchísimas pruebas de adaptación y de coexistencia entre el palmeral y la ciudad de muchos años antes de que se declarara Patrimonio de la Humanidad.
Seguro que se me pasan por alto multitud de casos de adaptación de la ciudad al palmeral sin contar los que todos ya conocemos y por lo que, en parte, fue declarado Patrimonio Material de la Humanidad.
En esta ocasión solo os contaré o mostraré algunos casos de adaptación que yo mismo he visto con mis propios ojos.
Elche como otras ciudades antiguas, tiene en sus calles más céntricas una gran cantidad de calles irregulares en parte debido a la adaptación a la forma de los huertos pasando muchas de ellas por los exteriores de los mismos que presentan o presentaban (en el caso de los ya desaparecidos que había en el centro histórico) formas irregulares y que han configurado la ciudad.
La ciudad ha ido creciendo y cambiando el uso agrícola de los huertos al perder estos el valor a nivel agrícola por la escasa productividad frente a la agricultura convencional y dándole otros usos cuando estos huertos pasaron de manos privadas a ser propiedad publica para crear dotaciones públicas como colegios y otros edificios municipales, respetando eso sí, la estructura original de los huertos.
Recuerdo cuando era pequeño, como había varias palmeras dentro del restaurante del Parque Municipal y es que resulta que construyeron el restaurante respetando las palmeras que se quedaron en su interior al construirlo aunque lo que parecía en principio una medida de respeto, protección y adaptación al medio, era tan solo un salvoconducto para respetar la ley del palmeral pero que con los años, al estar dentro del restaurante con el suelo pavimentado y eliminar el sistema tradicional de acequias que la regaban y alimentaban era cuestión de tiempo que las palmeras murieran de forma “natural”.
También recuerdo que no hace mas de 2 años había una palmera en el patio de la Universidad Cardenal Herrera CEU de Elche como única superviviente de lo que antes era un extenso huerto y que lo que parecía una adaptación a la construcción del edificio de la universidad respetando las pocas palmeras dispersas que quedaban, era también un mero trámite de eliminación a plazos que se daba desde que se construía el centro y se pavimentaba toda la superficie periférica vital para la captación de agua, oxígeno y otros recursos para la palmera y así contribuir de forma activa o pasiva a deteriorar poco a poco el estado de salud de esa palmera hasta un día poder argumentar que “por seguridad” la palmera se debía cortar y así fue….y aunque la palmera no suponía ni corría ningún riesgo, el personal no cualificado en palmeras del centro educativo, encargaron la ejecución y muerte de esa majestuosa y anciana palmera sin la reposición de otro ejemplar de menor porte como exigía la ley del palmeral.
En el huerto porta de la Morera, podéis ver otro ejemplo de adaptación al palmeral en la parte sur (junto a los juegos infantiles) donde hace años se instaló un templete de madera y metal y que se diseñó dejando el hueco para que una de las palmeras que hay allí, pudiera seguir en ese sitio sin tocarla.
En algunos huertos de Elche podemos observar que cuando los propietarios decidieron vallar o instalar muros en sus fincas, en ningún caso se eliminaron palmeras con motivo de esas obras, sino que o bien se quedaron fuera del muro, dentro o incluso integradas en el mismo como se puede ver en estas imágenes.
Solo he mencionado algunos casos pero hay muchos más por toda la ciudad y considero que es importante que tengamos conciencia de respeto y adaptación al palmeral en cualquier acción que llevemos a cabo cuando se actúe en una zona con palmeras, independientemente si están o no en zona UNESCO porque aunque la mayoría de ilicitanos no lo perciban al estar muy acostumbrados a ver palmeras, son muchos visitantes de la ciudad que me han comentado y han quedado asombrados cuando han observado algún caso en el que han podido percibir el respeto y el esfuerzo que se ha hecho a nivel publico y privado para desarrollar ciertas obras sin mover las palmeras que allí habitan y adaptarse a ellas que estaban desde mucho antes.
En los últimos años se ha perdido mucha conciencia al respecto de la adaptación de la ciudad al palmeral y más bien se está cambiando por poner el palmeral al servicio de la ciudad cosa que considero errónea y aquí van algunos ejemplos…
¿Hace falta un parking? No pasa nada, pavimentamos el huerto, conservamos las palmeras para que parezca que nos importan y les ponemos un alcorque decorativo que no sirve ni para que las raíces respiren ni para que quepa agua y ni siquiera le ponemos riego subterráneo por goteo.
En pocos años irán muriendo, no se repondrán, iremos pavimentando los huecos que dejan al cortarlas y poco a poco iremos borrando las huellas de las alineaciones de los huertos antiguos en una estrategia de «reordenación urbana vegetal»
Aquí va algún ejemplo gráfico de como se van borrando las huellas del palmeral ancestral y de sus alineaciones para que no molesten a los ciudadanos cuando andan por las baldosas.
Es muy muy importante que los ilicitanos tengamos conciencia de lo que se está haciendo y cada uno desde su posición, hagamos presión para que la ciudad vuelva desarrollarse adaptándose al palmeral y no al contrario.
Considero que el desarrollo de la ciudad y el respeto al palmeral y a su estructura original, son compatibles.
miguelangelsanchezmartinez 